Resumen: Si el autor actuó con conciencia del riesgo que creaba para la vida de la víctima, y a pesar de ello ejecutó su acción, la conclusión correcta es que se trata de un delito de homicidio, al existir al menos dolo eventual respecto al resultado de muerte. El acusado estaba esperando a la víctima provisto de una navaja de siete centímetros de hoja con la cual primero lo atacó por la espalda para continuar clavándosela a la víctima en distintas partes del cuerpo causándole múltiples heridas. La reiteración de las puñaladas con un arma blanca y particularmente en una zona corporal vulnerable como el pecho evidencia el animus necandi. El acusado estaba aquejado de esquizofrenia paranoide y cuando cometió los hechos estaba sufriendo además un brote agudo delirante con alucinaciones auditivas, por lo que se aplica la eximente completa de enajenación mental, y se le aplica la medida de seguridad de internamiento en centro adecuado a su dolencia.